La organización de un almacén es un factor fundamental en todas aquellas empresas que desean crecer de manera exponencial. Un almacén bien organizado permite una muy alta funcionalidad y operabilidad de su estocaje.
Una buena rotación de mercancías permite a las empresas procesar la demanda de pedidos de manera eficaz, posibilitando así el aumento sus ventas.
Para conocer, entre todas las formas de organizar nuestro almacén, la ideal para nosotros, el primer aspecto a destacar es definir bien qué tipo mercancías vamos a organizar.
¿Qué mercancías vamos a almacenar?
En nuestro almacén podemos llegar a depositar múltiples mercancías diferentes, desde útiles y herramientas de trabajo o pequeñas piezas almacenadas en cajones o gavetas de plástico, a grandes cargas paletizadas pensadas para ser movidas por carretillas elevadoras o transpaletas manuales, pasando por material empaquetado para ser transportado manualmente.
Pensar bien cómo debemos de almacenar nuestros productos es el primer paso para conseguir organizar nuestro almacén de manera eficaz.
Por esto, desde Tecny Stand contamos con varias gamas dentro de nuestros Sistemas de Almacenaje, pensadas para dar solución a los diferentes problemas de almacenaje de nuestros clientes. Igual que un médico no va a recetar el mismo medicamento a un paciente con fuertes dolores de estómago, que para una quemadura en la piel, nosotros no ofrecemos la misma solución para un cliente que almacena productos perecederos almacenados individualmente, que para almacenar piezas de automoción muy pesadas.
¿Cómo dispondremos la superficie para nuestro almacén?
La superficie útil que disponemos en nuestra instalación es el siguiente aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir que forma o formas de organizar nuestro almacén es la mejor para nosotros.
Dependiendo del espacio de nuestro almacén, podremos optar por unos sistemas de almacenaje u otros. En algunas ocasiones, la mejor solución pasará por combinar distintos sistemas de almacenaje, abarcando todas las necesidades de nuestro almacén. Tanto para cargas manuales, como para cargas paletizadas, existen diferentes sistemas, entre los que cabe destacar.
Sistemas de Almacenaje Convencional: Este tipo de sistemas de almacenaje son la opción más común y sencilla para organizar nuestro almacén. Si contamos con una superficie amplia en nuestras instalaciones, y nuestras necesidades logísticas son sencillas, como por ejemplo almacenar pequeñas cajas con un peso ligero, o una mercancía almacenada en palets con unas dimensione estándar y un peso homogéneo en todos los palet, y necesitamos un acceso directo a todas las mercancías almacenadas en las estanterías, esta opción es la ideal.
Sistemas de Almacenaje Compacto: Si necesitamos almacenar una gran cantidad de mercancías pero la superficie de nuestro almacén es escasa, podemos optar por soluciones compactas. Este solución de almacenaje permite múltiples formas de organizar un almacén; si vamos a depositar cargas manuales que necesitan un acceso directo a todas las referencias, la mejor opción es optar por una Entreplanta, formada a partir de Estanterías de Picking, que forma una estructura de varias plantas con estanterías, donde almacenar multitud de mercancías manuales de peso medio. En cambio, si nuestro almacén es, al igual que en el anterior caso, de escasas dimensiones, pero necesitamos almacenar mercancías paletizadas, podemos optar por soluciones como las Estanterías Compactas Drive-In, que gracias a su estructura con calles, nos permite depositar en el interior de dichas calles las mercancías paletizadas de manera compacta. Cada calle deberá de contener una única referencia.
Sistemas de Almacenaje Dinámico: Cuando nuestra instalación cuenta con distintos pasillos para la carga y descarga de nuestras estanterías, la mejor opción para nuestro almacenaje es contar con un sistema FIFO (First In, Firt Out), en los cuales la primera mercancía depositada en la estantería se desplaza sola por el interior de esta mediante sistemas de rodillos, llegando al lado de la estantería en la que se realizará la descarga. Este sistema de almacenaje es ideal para almacenes en los que la rotación del stock es muy elevada, además de contar con sistemas tanto para cargas manuales como para cargas paletizadas de mercancías.
Además de los sistemas anteriormente descritos, existen otras opciones menos comunes, que sirven para mejorar las formas de organizar nuestros almacenes; sistemas semiautomáticos como el TS Shuttle o estanterías para cargas pesadas largas como el Cantilever, que nos permiten maximizar nuestra superficie de almacenaje, mejorando nuestra logística interna.